Por: Yenny Alejandra
Aún recuerdo el día en que supe que iba a ser mama, no me sentía preparada para ti pero cambiaste mi vida desde el primer momento, pensaba que ser mama seria difícil, que no sería buena pero le pedí a dios que me preparara para ti, los siguientes meses fueron el inicio de los más felices de mi vida, aun te siento moverte dentro de mi como en esos días, en donde tus travesuras me impedían dormir en las noches, parecía que jugaras futbol dentro de mí, aún recuerdo como tu papa decía que eras niño, pero yo siempre supe que eras mi burusa preciosa, cuando naciste llenaste toda mi vida, no hay amor más grande que el que por ti siento, siempre fuiste sencillamente especial, recuerdo que el día que naciste me daba miedo cargarte porque sentía que te saldrías de mis manos y te lastimaría, eras tan pequeña e indefensa, poco a poco aprendí a cuidarte, eras mi muñeca, quería que te vieras siempre como una princesa, tu ropita combinada te hacia ver más hermosa de lo que ya eras.
Te veía e imaginaba un maravilloso futuro juntas, veía tu primer día de escuela, tus quince, tus primeros novios, tu universidad y le pedía a dios solo fuerza y salud para darte lo que necesitaras, para ser de ti una mujer con valores, dedicación, capaz de alcanzar sus metas y sueños sin pasar por encima de nadie. Ahora no sé qué hare con nuestros planes y sueños mi amada Valeria. Pero sabes tu cuerpo no está, pero tú vives en mí, y en cada una de las personas que te amamos. Y que cada día te recordamos como lo más hermoso que nos pudo haber pasado.
Eres la primavera de mi vida Miranda Valeria fuiste la mejor bebe del mundo, la más risueña, la más carismática, la más juguetona, naciste para ser grande, para ti no habían imposibles. Y aunque tu camino fue corto tu pasos dejaron huellas en todos los que te conocimos y te amamos. Para nosotros siempre serás la maravillosa, valiente y fuerte Miranda Valeria. Feliz Cumpleaños mi hermoso ángel, mi pedacito de cielo.
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